Jornadas de la matanza (Puebla de Lillo, León)

La fiesta consiste en la matanza de un cerdo, que posteriormente se subasta públicamente; así como la degustación, en los restaurantes de la zona, de un menú cuyos ingredientes proceden exclusivamente cerdo, a un precio único de unos 20€.

Con motivo de esta fiesta tiene lugar además una Feria Multisectorial en la plaza del pueblo, dedicada especialmente a las posibilidades de ocio en la zona, su gastronomía y el esquí de montaña (ya que a escasos kilómetros de la localidad se localiza la estación de esquí San Isidro).

La matanza y subasta del gocho

Puebla de Lillo es un pequeño pueblo de la montaña leonesa con pocos habitantes pero bastante visitado, especialmente en época invernal ya que se encuentra muy cerca de la estación de esquí de San Isidro, y es la única localidad de la vertiente leonesa próxima a ésta que ofrece un mínimo de servicios (restaurantes, alojamientos, tienda, farmacia…).

El pueblo ha crecido bastante en los últimos años, y se han construido bastantes viviendas.

La feria de Esquí y Ocio de Montaña consiste en una gran carpa instalada en la plaza del pueblo, en la que hay unos 37 stands de ámbitos muy diversos: artesanía, construcción, agroalimentación, turismo, material de esquí, etc. Aunque la carpa estaba calefactada mediante cañones de aire, no era suficiente porque la temperatura exterior era bajísima en esa época del año, e incluso estaba todo nevado.

Además de la feria, el sábado se realiza la matanza tradicional del cerdo (llamado gocho), y luego se subasta públicamente en la plaza. También se realizan unas jornadas gastronómicas de la matanza, con un menú degustación compuesto por morcilla y picadillo, patatas con costilla, lomo, cazuela de manos y morro, guiso de rabo y oreja, y de postre leche frita, arroz con leche o flan. El menú es excepcional, y sólo cuesta 22 euros, incluyendo vino, café de puchero y chupito de orujo. Tiene lugar en todos los restaurantes del municipio: Tía celestina (en Redipollos), Casa Federico y Los Rebecos (en Isoba), Madrid, Las Nieves, Ruta del Porma y La Mina (en Puebla de Lillo). Yo siempre comía en el restaurante Madrid de Puebla de Lillo, porque sirven genial, y la comida es excelente por norma general.

Pero bueno, os recomiendo que vayáis a Lillo a probar estas jornadas, porque merecen la pena (imprescindible reservar). En cuanto a la feria, ni fu ni fa, pero ya de estar allí se puede dar una vuelta y verla (con 15 minutos os sobra).

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Fecha de mi visita: Noviembre 2001