Escapada a Rioja Alavesa: Qué ver en Labastida

El fin de semana pasado tuve ocasión de hacer una escapada a la Rioja Alavesa por cortesía de Thabuca, una empresa de servicios turísticos especializada en el enoturismo, que convocó un concurso en su página de Facebook para celebrar su X Aniversario, del que resulté ser una de las afortunadas ganadoras en el perfil de «Gastroturista» 🙂

Vendimia en familia

Viñedos en Rioja Alavesa

Durante 3 días pudimos disfrutar de actividades tan variadas como la visita a varias bodegas de distinta índole, visitas guiadas a Labastida y Laguardia, e incluso participar en una vendimia en familia. Por supuesto, no faltó el disfrute de la buena gastronomía, acompañada de la cata de los magníficos caldos Denominación de Origen Calificada Rioja, que gozan de un merecido prestigio internacional.

De ello hablaremos en próximas entradas. En éste vídeo va un adelanto:

Pero hoy vamos a recorrer la localidad más blasonada de toda Rioja Alavesa: Labastida, cuyo casco histórico está declarado Conjunto Histórico Artístico. Fundada como Villa en el siglo XII, durante la Alta Edad Media fue una importante plaza de armas del Reino de Navarra, si bien tuvo su edad de oro en los siglos XVII y XVIII.

Labastida, la villa más blasonada de Rioja Alavesa

Labastida, la villa más blasonada de Rioja Alavesa

Por ello, Labastida tiene la particularidad de tener dos cascos históricos: la zona alta de la villa (barrios de la Mota y del Olmo) es la zona medieval, mientras que la zona baja está repleta de edificios renacentistas y barrocos. ¿Te unes al paseo para descubrir qué ver en Labastida?

Visita guiada a Labastida

1. Arco Larrazuría

Comenzamos nuestra visita guiada a Labastida en la zona baja, atravesando en Arco de Larrazuría. Puerta natural de entrada al casco histórico, es un arco de medio punto muy monumental, sobre el que se levanta un templete renacentista rematado en frontón triangular con obeliscos de caracteres esféricos.

Arco Larrazuría, Labastida, Rioja Alavesa

Arco Larrazuría, puerta de entrada al casco histórico de Labastida

Junto a él se encuentra la Fuente del Vaso. ¡A ver si consigues beber agua de ella!

Fuente del Vaso, Labastida

Fuente del Vaso

2. Calle Mayor

Proseguimos por la Calle Mayor de Labastida, donde encontramos una espectacular arquitectura civil en sus casas señoriales y palacetes con nobles escudos de armas, como el Palacio de los Garaizábal (cuya fachada muestra un hermoso blasón almohadillado)…

Escudo del Palacio de los Garaizábal, Labastida

Escudo del Palacio de los Garaizábal

O el Palacio de los Paternina (siglo XVII) donde, curiosamente, el mismísimo Napoleón Bonaparte estuvo alojado durante un par de noches, en Noviembre de 1809.

Palacio de los Paternina, Labastida

Napoleón estuvo alojado en el Palacio de los Paternina

3. Plaza de la Paz

Llegamos a la Plaza de la Paz, epicentro de la villa, donde se emplazan el Ayuntamiento (hermoso palacio barroco declarado Monumento Nacional), el Palacio de los Salazar y Quintano (Casa de Cultura y Oficina de Turismo), y la imponente fachada de la Iglesia de Ntra. Sra. de la Asunción.

Palacio Salazar y Quintano, en la Plaza de la Paz de Labastida

Palacio Salazar y Quintano, en la Plaza de la Paz de Labastida

Ayuntamiento de Labastida, Monumento Nacional

Ayuntamiento de Labastida, Monumento Nacional

4. Iglesia de Ntra. Sra. de la Asunción

De estilos renacentista y barroco, la Iglesia de la Asunción está declarada Monumento Nacional por partida doble: por un lado el propio edificio, y por otro su espléndido Retablo Mayor. El templo fue construido entre los siglos XVI al XVIII y en él se venera la imagen medieval de Nuestra Señora de Toloño.

Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, Labastida

Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, Monumento Nacional

Iglesia de Ntra Sra de la Paz, Labastida

Tiene una monumental portada, pero lo más sorprendente se halla en el interior: el retablo es el máximo exponente del barroco en Álava, y el órgano del siglo XVII es el más valioso del País Vasco. A destacar también la bonita sillería del coro, labrada en madera.

Interior de la Iglesia de la Asunción en Labastida

Interior de la Iglesia de la Asunción en Labastida

Nuestra Señora de Toloño, retablo mayor de la Iglesia de la Asunción, Labastida

Nuestra Señora de Toloño, retablo mayor de la Iglesia de la Asunción

Desde la Plaza de la Paz se divisa la Ermita del Santo Cristo en la zona más alta de la villa, dominando las laderas del Monte Toloño (1.271 metros) y la Sierra de Cantabria.

Vista de los viñedos y el Monte Toloño, Labastida

Vista de los viñedos y el Monte Toloño

Comenzamos la ascensión por la Subida al Olmo, bordeando la Iglesia de la Asunción. Por la parte posterior de la misma hallamos una bonita reja con un Descendimiento, réplica del que después veríamos en el interior de la Ermita románica.

Reja del Descendimiento en la Subida al Olmo, Labastida

Reja del Descendimiento en la Subida al Olmo

6. Plaza del Olmo y Arco de Toloño

Llegamos a la Plaza del Olmo, una recoleta plazoleta que antaño fuera el antiguo barrio de la judería.

Plaza del Olmo, antigua judería de Labastida

Plaza del Olmo, antigua judería de Labastida

En ella se encuentra el Arco de Toloño, antigua puerta de acceso norte a Labastida que se abría en la primitiva muralla medieval de la villa.

Arco de Toloño, Labastida

Arco de Toloño

En este arco comienza la Senda del Machiembrao, una ruta de senderismo en el que se van viendo curiosas piedras talladas con formas de rostros humanos, esfinges y símbolos (por ejemplo, un lauburu).

Senda del Machiembrao, Labastida

Senda del Machiembrao

7. Ermita del Santo Cristo

Un último tramo de empinada cuesta nos lleva al Templo Fortaleza del Santo Cristo, desde donde obtenemos unas espectaculares vistas de Labastida, del Monte Toloño y de las grandes extensiones de viñedos.

Subida al barrio del Olmo de Labastida

Subida al barrio del Olmo de Labastida

Exteriormente, destaca su monumental portada románica. La Ermita fue construida sobre una iglesia prerrománica cuyos restos pueden verse a través de unas cristaleras que cubren el pavimento. Bajo nuestros pies podemos ver también numerosas tumbas antropomorfas excavadas en la roca.

Ermita del Cristo de Labastida

Ermita del Cristo de Labastida

En el interior podemos apreciar sus dos etapas constructivas: románico en la parte oeste, y gótico de transición con influencias renacentistas (lado este).

Interior de la Ermita del Cristo, Labastida

Interior de la Ermita del Cristo

El altar mayor está presidido por un Cristo Crucificado que goza de gran devoción en Labastida, acompañado de la imagen de José de Arimatea subido a la escalera para el descendimiento. La postura de la mano derecha del Cristo, ya desclavada de la cruz, ha dado origen a numerosas leyendas populares en la villa (como que está propinando un bofetón).

Cristo de la Paz, en la Ermita del Cristo, Labastida

Cristo de la Paz, en la Ermita del Cristo

8. La Mota Alta

Proseguimos nuestro paseo por el barrio de la Mota Alta de Labastida, a través de un agradable sendero que parte de la ermita, en sentido descendente hacia la Plaza de la Paz. A lo largo del recorrido encontramos varios miradores, como el del Almendro, desde donde se divisa otra bonita perspectiva de todo el entorno.

Mirador del Almendro, Labastida

Mirador del Almendro

Barrio de la Mota Alta, Labastida

Barrio de la Mota Alta, Labastida

Antes de llegar de nuevo a la Plaza nos detenemos para admirar la fachada blasonada del antiguo Ayuntamiento, y el llamado Lagar de la Mota, uno de los múltiples lagares de elaboración de vino presentes en los sótanos de la mayoría de casas de Labastida (en este caso, la casa ya ha desaparecido).

Antiguo Ayuntamiento de Labastida

Antiguo Ayuntamiento de Labastida

Lagar de la Mota, Labastida

Lagar de la Mota

Finalmente, llegamos a la Plaza de la Paz, donde finaliza nuestro recorrido por esta interesante villa de la Rioja Alavesa.

Ermita del Cristo desde la Plaza de la Paz, Labastida

Ermita del Cristo desde la Plaza de la Paz

MÁS INFORMACIÓN:
Oficina de Turismo de Labastida
Thabuca organiza visitas guiadas a Labastida. Duración aproximada: 2 horas.