Donde no dormir en Calahorra: Hotel Ciudad de Calahorra

Dónde no dormir en Calahorra: en el hotel Ciudad de Calahorra, un alojamiento de lo más cutre con un servicio pésimo.

Cutre… pero muy cutre!!!!

‘Cutre-hotel’ en el centro de Calahorra, ideal para moverse a pie, pero de imposible descanso, por los ruidos procedentes del exterior (porque las ventanas/balcón ni ajustan ni aislan) y del interior del hotel (ya que las puertas y tabiques tampoco). Habitación y baño de reducidas dimensiones, mobiliario y decoración muy viejos, aunque las habitaciones limpias. Le hace falta una remodelación, o al menos arreglar lo que no funciona: aire acondicionado, grifos… para mantenerlo en estado semi-aceptable. Es un 2 estrellas, pero eso no exime de que esté en esas condiciones, máxime cuando cobran 73€ por noche y habitación doble.
El servicio del personal del hotel pésimo, que incluso se ‘cuelan’ en la habitación sin siquiera llamar a la puerta; y la variedad para el desayuno en su cafetería nula.
Habitación:
Raquítica habitación doble, con cama matrimonial de 135 cm (sin pedirla) y nada cómoda, con un amueblamiento del año ‘maria castaña’: un pesado armario de madera con puerta de espejo que olía a viejo, y un pequeño escritorio sobre el que se situaba el televisor (se veían algunos canales de tv satélite); no hay minibar.
Limpio, eso sí, incluso estrené sábanas, pues tuve que quitarle la etiqueta; la colcha y la manta también del ajuar de la abuela. Vamos, que aunque estaba todo limpio, daba hasta ‘repelus’ acostarse allí. (Pongo unas fotos de la habitación y el baño).

El suelo de la habitación era cerámico, y el baño… bueno, había que entrar de lado, la puerta abría para afuera (hacia la habitación); una mohosa cortina en la bañera, y el grifo monomando totalmente duro y atascado, no había forma de que saliera agua fría, y la caliente ardía, por lo que prácticamente era imposible darse una ducha; los agujeritos de la alcachofa de la ducha también estaban atascados, y sólo salía un pequeño hilo de agua. Por supuesto, nada de ‘botecitos’ de gel y demás enseres típicos…
Vistas? si, había una terraza que daba a la fachada principal, pero casi era mejor no tenerla, porque los ruidos eran insoportables; la ventana no ajustaba ni aislaba nada, aunque tenía persiana.

El estado de la habitación deplorable, daban ganas de salir corriendo, y el aire acondicionado brillaba por su ausencia. Bien es cierto, que en la pared sobre la puerta del baño (vaya accesibilidad, te tenías que subir a una silla para alcanzarlo) existía una rejilla que parecía serlo, con un termostato, que evidentemente no funcionaba.
Instalaciones generales del hotel:
La fachada del hotel es la de un edificio normal, de ladrillo caravista, sobre la que está colgado el letrero luminoso de color amarillo chillón que pone ‘hotel’. La recepción consitía en un mostrador que separaba el ascensor de subida a las plantas de dormitorios de la cafetería, y una misma persona se encargaba de atender cafetería y recepción, así que paciencia…
Nada de animación, balneario, piscina, gimnasio ni nada semejante. En cuanto a tecnología, habia cartelitos anunciando wifi (pero no lo contrasté).

En cuanto al resto de clientes del hotel… a las 2 de la madrugada llegó un grupo-excursión para alojarse en el hotel, y el escándalo que organizaron por los pasillos hasta que se organizaron en sus habitáculos hizo imposible pegar ojo, porque los tabiques y las puertas deben ser de papel, se oye absolutamente todo, además de que demostraron ser bastante indecorosos y maleducados. La misma operación cuando se fueron a primera hora de la mañana.
En cuanto al personal del hotel, decir que ambas noches se ‘colaron’ en la habitación, sin siquiera llamar a la puerta, para hacer la habitación sobre las 9-10 de la mañana del fin de semana. Evidentemente, tampoco existía el típico cartelito de ‘no molestar’ para colgar en la puerta.
A partir de las 12 de la noche, la puerta se cierra, y hay que llamar al timbre para que el conserje abra.
Comidas y Bebidas:
No comí en el restaurante, pero sí desayuné en la cafetería, un café con bollería. A las 11 de la mañana de un sábado únicamente les quedaba una ensaimada. La decoración del lugar no invitaba en absoluto a tomar nada.
Al día siguiente desayuné en un obrador muy agradable que hay en la misma calle, unos metros más adelante en dirección al Ayuntamiento (mucho más recomendable).
Ubicación y Alrededores:
Lo único bueno del hotel, su localización dentro de la ciudad, a escasos metros del Ayuntamiento, por lo que se puede partir de aqui, a pie, para visitar la ciudad o ir de compras por Calahorra.
En los alrededores había algún pub, pero el ambiente nada aconsejable para mi gusto, y lleno de extranjeros (árabes, moros…).
La mala construcción y aislamiento hacía que fuera imposible conciliar el sueño, por los estrepitosos ruidos que se oían durante toda la noche del fin de semana (coches, acelerones, gritos y conversaciones… ) se oía todo!! También los ruidos de habitaciones contiguas y pasillo.
Un poco más arriba, en la misma calle había una parada de taxis, pero no había ninguno (ni viernes noche ni sábado por la mañana); en la parada un cartel con los números de teléfono (móviles y de casa) de cada taxista, para que les llamaras y te fueran a recoger (si les interesaba la carrera).
DATOS:
Estrellas: 2
Dirección: c/ Maestro Falla, 1
26500 Calahorra
Teléfono: +34(941)147434
Fax: +34(941)147434