3 Monumentos Patrimonio de la Humanidad en Sevilla

Sevilla es una de las ciudades monumentales más visitadas de España, por la que han pasado muchas y diferentes culturas a lo largo de los siglos. Fruto de este legado, la capital hispalense conserva un gran patrimonio cultural, monumental y artístico que hoy podemos admirar en sus calles, plazas, edificios históricos y museos. Conozcamos tres monumentos Patrimonio de la Humanidad en Sevilla: la Catedral, los Reales Alcázares y el Archivo de Indias.

Panorámica nocturna de Sevilla

Panorámica nocturna de Sevilla

Estos edificios constituyen un magnífico ejemplo de las grandes etapas de la historia urbana de la ciudad (musulmana, cristiana, y como Puerto de Indias). Además, la Catedral, el Alcázar y el Archivo de Indias están directa y tangiblemente asociados con un evento de importancia universal: el descubrimiento del Nuevo Mundo por Cristóbal Colón en 1492, y la colonización de América. Tal es así que la UNESCO los declaró Patrimonio de la Humanidad en 1987.

Y es que Sevilla debe su importancia a los siglos XVI y XVII, cuando fue designada la “Puerta de las Indias” y exclusivo puerto comercial en la ruta del comercio con América Latina.

 

La Catedral de Sevilla y la Giralda

La Catedral de Santa María de Sevilla sorprende por sus dimensiones. Es el edificio gótico más grande de Europa y el tercer templo del mundo en extensión (después de la Basílica de San Pedro en Roma y la de San Pablo en Londres). Su retablo mayor también presume de ser el mayor del mundo.

La Catedral de Sevilla fue levantada en 1403 sobre una antigua mezquita islámica, aunque de ésta lo único que se conserva es el Patio de los Naranjos y su alminar, reutilizado como campanario. Bautizado con el nombre de la Giralda, está considerado una obra maestra de la arquitectura almohade y se ha convertido en el símbolo de la ciudad.

La Giralda y el Giraldillo de la Catedral de Sevilla

La Giralda y el Giraldillo de la Catedral de Sevilla

Uno de los elementos más destacables de la Giralda es su veleta, conocida como El Giraldillo, que representa el triunfo de la fe. Una rampa interior de 34 tramos permite subir a la parte más alta del campanario para contemplar unas vistas espectaculares de la ciudad desde casi 100 metros de altura.

De interés en el interior de la Catedral son: la Capilla Real, que alberga la Virgen de los Reyes (Patrona de la Archidiócesis), el cuerpo incorrupto del rey Fernando III El Santo, y el sepulcro de Cristóbal Colón.

 

El Archivo de Indias

La antigua Lonja de Mercaderes -comenzada a construir en 1584- fue adaptada para Archivo de Indias en tiempos de Carlos III. Debe su importancia a que custodia la mayor colección de documentación relativa al descubrimiento y a las relaciones con el Nuevo Mundo durante el período de colonización española.

Archivo de Indias de Sevilla, Foto de Samu Betico (Lic. CC)

Archivo de Indias de Sevilla, Foto de Samu Betico (Lic. CC)

Diseñado por Juan de Herrera (arquitecto responsable de completar El Escorial), el Archivo de Indias es uno de los ejemplos más representativos del estilo manierista en Sevilla. Sus influencias de la arquitectura barroca andaluza y española del neoclasicismo, simbolizan el vínculo entre el Antiguo y el Nuevo Mundo.

 

Los Reales Alcázares de Sevilla

Construidos en el siglo X y reconstruidos varias veces desde la Edad Media hasta nuestros días, los Reales Alcázares son un conjunto de edificios palaciegos y amplios jardines concebidos como residencia de monarcas y jefes de estado.

Los Reales Alcázares de Sevilla

Los Reales Alcázares de Sevilla

El conjunto de los Reales Alcázares de Sevilla es un testimonio de la convivencia cultural entre Oriente y Occidente y un ejemplo de superposición de estilos de diversas épocas, en el que las áreas del original palacio almohade conviven con el suntuoso palacio mudéjar de Pedro I, y junto con otras construcciones que van desde el renacimiento hasta el neoclásico.

 

Pero además de estos tres monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad, Sevilla destila alegría y bullicio en cada una de las calles y plazas que configuran su casco histórico: casas a las que se accede atravesando maravillosos patios privados, barrios pintorescos (como el de Santa Cruz), pequeñas tiendecillas, talleres artesanales, mercadillos, múltiples cafés con terrazas, bares y tascas donde tapear…

Todo ello bien merece hacer una escapada a Sevilla en cualquier época del año, así que ¿a qué esperas? Reserva un hotel en Sevilla y ven a conocer estos 3 monumentos Patrimonio de la Humanidad de la ciudad hispalense.